José Mujica

     La verdad es que al igual que en el caso de Alan Parson oír a Meyer significaba para mi un reto interesante. Nunca tuve suerte con esta marca en mis viajes a Nueva York a la convención de la AES (Audio Engineering Society) Las veces que asistí a su Demo room la gente de Meyer tenía puesto un disco de Chick Corea que no me dejaba apreciar a plenitud el comportamiento de estos interesantes altavoces.

     El seminario fue dictado por el Ingeniero Mejicano Salvador Castañeda, estaba presente también el Ingeniero venezolano Juan Carlos Yépez, también perteneciente a Meyer. El seminario giró sobre las técnicas del empleo de filtros para conjugar fases de fuentes sonoras. Salvador es un experto impecable en la materia. Se tomó con mucha paciencia todo el tiempo necesario para que los más interesados manejaran los conceptos y pruebas que se hacían.

Salvador en las pruebas de los subs

     De Meyer he hablado antes, leer Hablemos un poco de altavoces, Hasta el año pasado, yo no entendía porque los mejicanos se volvían locos por el Sonido de Meyer Sound. Tal vez ayudado por la limpieza de la rítmica del grupo Maná (Lo que me recuerde mi asiduo comentario sobre probar altavoces con bajos MIDI).

      Meyer explota lo que yo llamo el síndrome de Bose, lograr alta potencia en los bajos profundos, frecuencias de 80Hz para abajo, en altas potencias. Esto impactará siempre a un público que está acostumbrado a oír en todas las marcas de altavoces, Bajo-Medios de gran potencia y poco bajo elegante. Con este acto Meyer pretende con talento enfrentar a los grandes monstruos históricos de las marcas de altavoces, lo cual tiene su mérito. Pero este problema me recuerda a la lucha de Mac con las matemáticas y las PC's con el multimedia, ambas partes tienen que aprender algunas cosas una de la otra.

Feliciano Salerno, Juan carlos Yépez, el sucrito y Salvador. En la Otra mis queridos Gilberto Montanni y Ruoco Raffaele

      Por cierto usaron a Sting para probar Mis lectores saben mis opiniones de las grabaciones de Sting para las pruebas de altavoces. Por lo demás, la parte de la selección de la banda de Jazz contemporáneo me pareció genial. La operación de Juan Carlos en la mezcla de la banda estuvo muy buena. Este tipo de música elaborada te permite apreciar los diferentes sonidos con mucha claridad. Salvador se lanzó con un arreglo de sub-bajos distribuidos, es decir no apilados a ambos lados de la tarima, sino de uno en uno sobre una línea paralela al frente de la tarima. En este punto tuvieron unos problemas de fase entre los componentes. Me tuve que ir cuando él iba a arreglar el problema. En los subs oí unos Medio-bajos bien interesantes.

      La presión sonora era abundante a 35 metros de la tarima, donde me encontré la mayoría del tiempo. Lamentablemente la pista de música sinfónica seleccionada no permitió apreciar en toda su gama a las unidades de medios y agudos, debido a un rango dinámico bajo.

     La verdad fue agradable el evento al encontrarme a tanta gente conocida y sobre todo a mis exalumnos, a algunos tenía años que no les veía.

     A Audio Concept hay que felicitarlo, porque este tipo de eventos enriquecen el medio. El diploma que otorgaron tiene reconocimiento internacional y este tipo de cursos en otras latitudes tiene un costo.

     El tercer día no pude asistir y al cuarto me volvieron a caer encima diciéndome que Salvador lo había medido y era cierto  al sumar dos fuentes se obtenían +6dB. Detuve en el camino a Nerio Rojas de Maracaibo estudiante avanzado de Física pura y fue el único que me dijo que él sabía que eso no era así. Le dije que por qué no había intervenido para aclarar la situación y me dijo que no valía la pena. Vi pasar a el gran Memo y le conté lo que estaba sucediendo y me dijo que sí, que él sabía desde siempre que eran +6dB. Le comenté a Montanni y ni se inmutó.

     Por último me dirigí a Salvador a preguntarle y me dijo que en efecto eran +6dB. Total que desde Don Davis para abajo todos los textos estaban equivocados. A todos les dije: que tal aseveración debía ser hecha dentro de un contexto, porque era delicada. Es decir debía limitar la afirmación a las condiciones en las cuales ocurre. Lo cierto es que si eso se hizo el auditorio no lo entendió de esta manera. Los asistentes salieron afirmando que al sumar dos fuentes se obtienen +6dB.

     Le prometí a mi gente y al mismo Salvador que iba a demostrar por qué si bien la fórmula de las presiones lleva el 20, cuando se suman dos "fuentes de sonido" la ganancia es de +3dB. No he tenido el tiempo de plantearlo en español de una manera ligera como es mi estilo. La verdad es que nunca nadie me había puesto en el dilema de demostrar por qué un metro es un metro, pero en la siguiente dirección del Colegio de Santa Fe, verán que las presiones que se suman resultan de la media cuadrática y no de valores absolutos y por lo tanto se debe precisar con mucho énfasis en que situaciones ocurre tal aseveración.

Adding Decibels

El próximo mes les tendré seguramente una sorpresa a los incrédulos.