El arte de la ecualización

Oscar Alvarez

     Un gran número de entusiastas del audio, utilizan ecualizadores para ajustar la respuesta de frecuencias de su sistema de sonido, ya sea para compensar por la acústica del salón, para compensar deficiencias de los altoparlantes o para crear efectos en las grabaciones.

     Un ecualizador es un dispositivo que permite ajustar la respuesta de frecuencia de una señal de audio, aún los controles de bajos y agudos, califican como ecualizadores. La ecualización es el aumento o disminución de una parte, porción ó banda de frecuencias de audio. Sin embargo el termino implica equipos más complejos y sofisticados, tales como los utilizados por los ingenieros de grabación.

     Veamos algunas razones por lo que la ecualización es útil y como su implementación se ha convertido en un arte.

     Los controles de bajos y agudos, son dispositivos de banda ancha que tienen el mayor efecto en los extremos de la banda, es decir los bajos más bajos y los agudos más altos. Esto está bien para "retocar" la respuesta del sistema de sonido del carro, no es de mucha ayuda para corregir "coloraciones" de banda angosta que a veces son muy molestas. Por ejemplo, un "pico" en la banda de medios-altos puede producir un sonido estridente que normalmente un control de agudos no puede moderar. Al bajar el control de agudos para eliminar la estridencia, también los agudos altos se ven disminuidos, quitándole claridad y definición a la música.

     Del mismo modo, el utilizar el control de bajos para eliminar un sonido "encajonado", tampoco es de mucha utilidad, ya que también se disminuirán las frecuencias más bajas que son muy importantes para una reproducción realista y quizá sin resolver el problema del encajonamiento del sonido. Para esto hay una forma mejor de hacer las cosas, y es utilizando un Ecualizador Gráfico.

     El ecualizador gráfico se ha hecho muy popular en los últimos años. Se llama gráfico porque cuando se ajustan los controles deslizantes, la posición da una imagen muy aproximada de la respuesta de frecuencias resultante.

     Estos dispositivos dividen el espectro auditivo en cinco ó más bandas de frecuencias permitiendo el ajuste de cada banda con su respectivo control de aumento ó disminución. En vez de ajustes bastos de agudos, medios (llamados también presencia),se obtiene un control independiente sobre los bajos profundos, los bajos medios, los bajos altos, los medios bajos y así sucesivamente. Si atacamos el énfasis de lo estridente en el medio – agudo con un ecualizador gráfico de banda de 1 octava, podemos más ó menos en cierta forma, corregir el pico problemático. Decimos más ó menos porque es muy posible que la frecuencia problema, no corresponda exactamente con una de las frecuencias de un ecualizador de 10 bandas.

     Por eso es que muchos profesionales del sonido, estudios de grabación y entusiastas del sonido, que buscan resultados más precisos, utilizan la ecualización de 1/3 de octava. Usualmente estos tienen 27 a 31 bandas, y cuando son ajustados con equipos apropiados – generador de ruido "rosado", analizador de espectro de audio en tiempo real, micrófono calibrado, etc. – se puede lograr de un sistema de altoparlantes de alta calidad, una respuesta "plana" con una variación de 1 ó 2 dB en la mayor parte del rango auditívo.

     Pero hay mucho más en la ecualización, que simplemente corregir altoparlantes y salones. En la próxima entrega  veremos algo de Ecualización en el Estudio.